Demandamos Garantías de Participación para la construcción de País

Con enorme preocupación observamos la grave situación que enfrentan organizaciones sociales y de derechos humanos, ante la falta de garantías para participar en la reconstrucción del país. La sistematicidad en las amenazas, intimidaciones y asesinatos a defensores y defensoras de derechos humanos, es intolerable.

La Defensoría del Pueblo documenta 120 asesinatos de defensores y defensoras en los últimos 14 meses. Al menos 310 organizaciones están en riesgo en todo el país. Organizaciones que tienen una apuesta por la implementación de los acuerdos de paz con la FARC y la participación en los diálogos con el ELN, con agendas consolidadas y viables. Situación que genera un ambiente de inseguridad e incertidumbre generalizada para el ejercicio de participación ciudadana. Los diferentes informes y mecanismos de derechos humanos, así lo documentan. 

Evidenciando la intencionalidad, de los enemigos de la paz, de seguir imponiendo un modelo de sociedad, donde impere el terror y el sometimiento a un modelo político, económico y social mafioso, depredador, discriminatorio y excluyente. 

Expresamos nuestra indignación, por los asesinatos a defensores y defensoras de derechos humanos. Las detenciones de líderes y liderazas sociales, que tienen una apuesta por aportar a la paz. La lentitud y los retrocesos en la implementación de los acuerdos. Todo ello genera un ambiente de inseguridad y están siendo un obstáculo para alcanzar la justicia, la paz y la conciliación en nuestro país. 

El Estado Colombiano, debe actuar con la contundencia debida, ahora que el momento histórico lo demanda. Para que la ciudadanía recupere la confianza en las instituciones y la democracia, como el escenario que posibilita la construcción de una paz transformadora, basada en la justicia y la convivencia pacífica

Nos solidarizamos con la Corporación Sisma Mujer, que vive una situación de amenazas, ataques permanentes y acciones irregulares de la fuerza pública. Y con todas las organizaciones sociales y de derechos humanos que sufren agresiones permanentes contra su integridad. Respaldamos su trabajo a favor de nuestro derecho a vivir una vida libre de violencias. 

Demandamos al Estado Colombiano, la debida diligencia que se requiere, en el desmantelamiento de las estructuras de muerte que hay detrás de los autores materiales de los asesinatos y hostigamientos permanentes hacia las organizaciones sociales y de derechos humanos. Si de verdad hay una apuesta por respetar los acuerdos y transformar las causas de la violencia, es fundamental contar con una fiscalía fortalecida para el desmantelamiento de la estructura paramilitar, que hoy está más viva que nunca. No se trata de neutralizarlas.

Demandamos la implementación de la Comisión de Seguridad y Garantías, que empiece a operar con los recursos suficientes y cumpla su función. Que se revise el Programa de Protección, desarrollando acciones preventivas con eficacia.

Agradecemos a todas las organizaciones nacionales e internacionales que acompañan y expresan su solidaridad con la grave situación de las organizaciones sociales, defensores y defensoras de derechos humanos.

Seguiremos denunciando y manteniéndonos en alerta para que se conozcan los hechos de muerte y la falta de garantías para defender los derechos humanos y la construcción de paz. Colectiva de Mujeres Refugiadas, Exiliadas y Migradas en España